La gran cantidad de datos que se generan en el mundo es enorme y continúa creciendo a un ritmo exponencial. Según un informe de la consultora IDC, se espera que todos los datos generados en el mundo alcancen los 175 zettabytes para el año 2025. Esta explosión de datos presenta tanto desafíos como oportunidades para las organizaciones que desean aprovechar al máximo la información que tienen a su disposición. Por esta razón, es fundamental que las empresas cuenten con alguno de los diferentes tipos de almacenamiento de datos que existen para llevar a cabo una correcta gestión de los mismos. ¿Tienes que gestionar una gran cantidad de datos? En este artículo resumimos los principales sistemas existentes.
Los principales tipos de almacenamiento de datos que existen y sus beneficios
El almacenamiento de datos es una necesidad fundamental en cualquier dispositivo informático. Desde los teléfonos móviles y las tablets hasta los servidores y supercomputadoras más potentes, todos ellos requieren de algún tipo de almacenamiento para poder funcionar correctamente.
La capacidad de almacenar datos está directamente ligada a la posibilidad de modificarlos o consultarlos. Los datos almacenados pueden ser accedidos y procesados en diferentes momentos y situaciones, lo que permite a los usuarios utilizar la información almacenada para tomar decisiones informadas y realizar tareas específicas.
La aparición del Big Data ha revolucionado el mundo de la gestión de datos, obligando a las organizaciones a ser capaces de gestionar grandes cantidades de información de manera efectiva. Sin embargo, para lograrlo es necesario contar con dispositivos que permitan tanto la gestión directa como la indirecta de los datos.
Además, es importante tener en cuenta que, si no se dispone de suficiente memoria o almacenamiento, la capacidad para trabajar con los datos se ve seriamente limitada.
Los tipos de almacenamiento de datos que existen son, básicamente, dos. En primer lugar, el almacenamiento primario. Por otra parte, el almacenamiento secundario.
Almacenamiento de datos primario
El almacenamiento primario engloba aquellos dispositivos internos de memoria. Esto es, que están dentro del ordenador. Este tipo de almacenamiento es básico para que el dispositivo pueda realizar sus tareas cotidianas. Eso sí, es importante señalar que esta memoria se pierde cuando se apaga el dispositivo o pierde energía.
Un caso universal es el de la memoria virtual, también denominada RAM. Este método de almacenamiento de datos de acceso aleatorio sirve para ejecutar determinados programas o aplicaciones. En consecuencia, se convierte en un elemento fundamental para un funcionamiento correcto. Esta memoria se hizo necesaria a partir de la década de 1990 para arrancar nuevas aplicaciones.
El segundo tipo de memoria que existe es la ROM, de solo lectura. También es necesaria para poder trabajar en el día a día. Esta memoria sirve para almacenar software u otro tipo de elementos que no se van a modificar. De hecho, los ordenadores que utilizan el sistema operativo MS-DOS funcionaban, básicamente, con memoria ROM.
Almacenamiento de datos secundario (o no estructurado)
Los dispositivos de almacenamiento secundario son, básicamente, los externos. No son necesarios para que el sistema funcione per se, pero sí que permiten el almacenamiento. La principal característica distintiva es que los datos se almacenan, aunque se apague el dispositivo principal.
El disco duro (HDD) es el principal elemento de almacenamiento secundario porque es el que mayor capacidad tiene. Este puede estar dentro o fuera del ordenador, según lo que se desee. La principal función es la de almacenar todo tipo de datos. En estos casos, lo normal es que la capacidad de almacenamiento sea superior a los 200 GB de memoria.
La memoria externa, o USB, es un pequeño disco duro en miniatura que funciona a través de un puerto. Como principio general, tienen una capacidad mucho menor que la de un disco duro convencional. Eso sí, tienes la posibilidad de llevar este dispositivo en tu bolsillo porque es muy pequeño. Este tipo de dispositivo se utiliza, sobre todo, para proyectos puntuales.
Finalmente, hay que hacer referencia a pequeños dispositivos de lectura que permiten reproducir información grabada. La cantidad de datos que se pueden almacenar es más pequeña. En un primer momento fueron los disquetes. Posteriormente, y en la segunda mitad de los 90, el CD. Finalmente, los DVD. Su uso es cada vez menor, pero siguen existiendo.
Los distintos tipos de almacenamiento de datos son útiles para que puedas trabajar mejor en tu día a día. Dell Technologies te ofrece distintas opciones para que puedas realizar una gestión inteligente de datos. Un caso interesante es la solución PowerVault ME4, que te puede solucionar multitud de problemas.
Si gestionas una empresa u organización, es útil que conozcas el catálogo de posibilidades. Esto te facilitará tus tareas y te ayudará a ser más eficiente.